ARTÍCULOS DE OPINIÓN

 

TE VEO Se encuentra en danza
Unas conclusiones particulares del Encuentro celebrado en Barcelona del 26 al 28 de enero de 2012

Escribir las conclusiones del primer Encuentro que TE VEO celebra con la danza es una tarea hermosamente compleja que me ha ocupado un tiempo mucho mayor de lo que imaginaba. Agradezco vuestra paciencia. El espacio para la reflexión que planteaba este encuentro me despertó un proceso de reflexión en el que todavía sigo inmersa, impulsada también por mi asistencia la semana siguiente a la plataforma British Dance Edition en Londres, donde el ambiente y los ánimos son mucho más dinámicos que los que estamos viviendo en España en estos momentos.

Un encuentro supone un intercambio de ideas y perspectivas, de posibilidades y proyectos de futuro. En el caso del primero encuentro que TE VEO organizaba, con el Mercat de les Flors, alrededor de la danza, había ciertas expectativas razonables que podría aplicar a la reunión de un colectivo de personas inquietas, comprometidas y creativas. Resultó ser, en mi opinión, mucho más.

Un encuentro: ¿para quiénes y para qué?

La estructura del Encuentro abordó todo el entramado formación-creación-exhibición. Allí coincidimos profesionales de la escena, de la educación y de la gestión, los espectadores más jóvenes y sus familias.

A los que nos movemos dentro de la danza nos hacía mucha ilusión la oportunidad de ser más visibles para nuestros compañeros de aulas, escenarios y reuniones del sector, como comentó Omar Meza en la presentación. Se trataba precisamente de la posibilidad de compartir desde nuestra experiencia, de aprender de las experiencias de otros, partiendo desde una posición de valoración. De sentirnos integrados y romper con la sensación de aislamiento que a menudo asola la danza y a la que seguramente contribuimos en muchas ocasiones sin percatarla.

Esta vez nos tocaba a nosotros compartir no solamente desde nuestras propias vivencias sino también a través de compañeros de profesión que desarrollaban sus proyectos en otros países, con otras miradas y con otra consideración profesional.

Celebrar este encuentro en Barcelona, con El Mercat de les Flors y el Graner como anfitriones fue otro acierto. El proyecto del Mercat y las infraestructuras que lo albergan son una referencia para la danza y ejemplos de coherencia y programación estable. El Mercat lleva una programación de danza para los más pequeños que cuenta con un público fiel y materiales didácticos específicos. Aprovechamos para conocer el nuevo espacio para residencias que inicia su andadura, El Graner. Gracias a ambos espacios y a sus respectivos equipos por asumir la tarea compleja de alojar a este Encuentro.

Fueron tres días intensos en los que las actividades programadas, la asamblea de los socios de TE VEO, la comunicación entre compañeros, y el “networking” convivían. Durante tres días dejamos de hablar casi exclusivamente, por lo menos durante unas horas, de justificaciones numéricas, para vivir diversos procesos, todos partiendo de un reconocimiento del valor intrínseco de la danza, de la labor escénica, de la educación y la cultura. Un respiro muy necesario para recuperar fuerzas.

Era importante para nosotros encontrarnos con nuestros compañeros de aula y escena desde lo teatral. Sabemos que os necesitamos pero a veces parece que os olvidéis de que nos necesitáis también, y no solamente por cuestiones de solidaridad gremial. La danza para las primeras edades tiene una mirada informada, sensible e inteligente, de la que se puede aprender mucho. El aspecto pedagógico se cuida mucho y la capacidad trasmisora es enorme por la conexión tan directa entre los pequeños y el movimiento.

El diálogo entre las compañías de teatro y de danza para públicos jóvenes está aún poco desarrollado en España. Deberíamos aprovecharlo al máximo, por lo que aporta a nuestros trabajos, a nuestro público y a nosotros mismos.

En escena, en movimiento

Aracaladanza, DA.TE Danza y Nats Nus, cada una con una larga y premiada trayectoria en la creación coreográfica para público joven, presentaron espectáculos en El Graner y El Mercat para un público familiar entregado.

“Río de Luna” de Omar Meza/DA.TE Danza, y “Cu-cuco” de Carolina Arija y Raquel de la Plaza, bailarinas de Aracaladanza, se dirigen, en su ritmo, espacio, trabajo con objetos y duración, a los más pequeños (de 0 a 3 años). “Maps” divierte con el bagaje (en el sentido más amplio de la palabra) de cuatro personajes, para niños y niñas de 6 a 12 años y sus familias.

El taller que ofreció el coreógrafo Enrique Cabrera para docentes fue una pequeña introducción a posibilidades prácticas para trabajar el movimiento en las aulas. Se nos quedó corto pero situó el Encuentro en otro plano al ponernos en movimiento.

Punto y aparte merece la lección magistral que ofreció Toni Jodar para los asistentes al Encuentro. Su Acción Danzada, en la que explica La Danza Moderna y Contemporánea, es una ilustración inteligente y amena que sitúa la danza moderna dentro de su época, conectada con las ideas, descubrimientos, creadores y corrientes que alimentaron a los coreógrafos citados. Es una representación sumamente adaptable que combina una sabia esencia escénica con la cercanía de una charla entre contertulianos.

De este Encuentro saldrán merecidas programaciones y las internacionales aportarán no sólo ingresos sino también reconocimiento en casa.

¿Por qué estamos en esto?

*”Todo empieza para todos en la danza. En ese irrepetible gran paso a dos de huella indeleble, que supone una mujer embarazada”.

Fue un gran acierto inaugurar este Encuentro con la presentación de Lali Bosch. Realizó un defensa elocuente, erudita, apasionada y bien ilustrada del papel primordial del movimiento y de la danza en la formación del yo desde la primera infancia. Abordó con palabras e imágenes potentes y poéticas cómo nos formamos en movimiento, como individuos, dentro de nuestro entorno inmediato, y con el mundo. Repasó la importancia de la danza en el proceso de aprendizaje global y el papel de la cultura como reflejo activo y activante. Recordó que los procesos naturales de los más jóvenes ofrecen lecciones importantes que la pedagogía debería tener en cuenta.
*”Cuando las niñas y los niños están experimentando el movimiento sin ningún otro objetivo que el gusto por la experimentación misma, es el momento de ofrecerles la posibilidad de bucear en el mundo de la danza, para crear contexto a su espontaneidad. Para que puedan sentir compañía y complicidad sin más. Para que perciban la energía que generan los cuerpos que se cruzan en el camino”.

En unos momentos en los que se están replanteando tantas cosas, nos terminamos dedicando gran parte de nuestros esfuerzos a la gestión y la supervivencia – obviamente de importancia fundamental. Fue de gran ayuda dedicar un tiempo a la verdadera esencia de nuestra labor, para recordar el por qué de nuestro compromiso, para valorarnos y sentirnos valorados y comprendidos. En nuestra lucha por lo práctico no podemos olvidarnos d la poética.

Otras realidades

Fue sumamente enriquecedor el encuentro con compañeros internacionales que compartieron con nosotros experiencias en las que el tiempo y la estabilidad han permitido que la visión creadora siga madurando con otro ritmo.

Davide Venturini nos habló de los fundamentos creativos y teóricos de TPO, donde la tecnología tiene una sólida base creativa y funcional que a través de los ambientes sensibles proporciona experiencias enriquecedoras, estimulantes y placenteras a los participantes, tanto bailarines profesionales como jóvenes. Me impresionó la profundidad del trabajo previo que TPO realiza a la hora de concebir sus creaciones y la visión arquitectónica, filosófica e imaginativa con la que forman sus trabajos. El reparto de responsabilidades para la creación entre los participantes es otro aspecto a resaltar así como la sensibilidad a la hora de hacer convivir las capacidades técnicas de TPO con las miradas de otras culturas.

La visión de Emma Gladstone como programadora y productora en el Saddler´s Wells fue inspiradora. Es el caso, tan infrecuente en nuestra experiencia nacional de la cultura, de tener una persona con visión en un cargo que le permite desarrollarla con grandes beneficios para los artistas y el público. Esta visión no vive a espaldas de la realidad económica pero se desarrolla en un contexto (y con unas importantes infraestructuras) en el que se reconoce la importancia de la aportación de la cultura a la sociedad. Esta misma valoración es el motor de la incorporación de la danza en el currículo nacional de educación básica y de los programas de danza en comunidad tan extendidos en el Reino Unido. En el caso del Saddler’s Wells la programación de una oferta más comercial en los espacios de mayor aforo ayuda a financiar programas que invierten en nuevos procesos y proyectos de artistas cuyas líneas de trabajo son más arriesgadas. Esta visión tiene como finalidad cultivar y cuidar a los creadores y al público.

Un proyecto como el del Saddler´s Wells debe mucho a un principio muy británico, la famosa “arm’s length policy”, que establece que hay que mantener cierta distancia entre la política y los contenidos de programas para que un cambio de política no pueda borrar de un plumazo el trabajo de años en un campo específico, como la cultura. Igualmente hay menor dependencia económica de los fondos públicos y mayor desarrollo del patrocinio privado e ingresos generados por los propios proyectos.

Emma hizo eco de unos criterios que comparten todos los programadores que desarrollan una verdadera visión para sus espacios. A la hora de seleccionar espectáculos para sus espacios teatrales o propuestas para residencias de investigación “busco proyectos que son claros y elocuentes, distintivos, personales y valientes.” El seguimiento de las creaciones producidas o programadas en el Saddler’s Wells demuestra el acierto de esta apuesta.

Recibimos importantes lecciones sobre la articulación elocuente de nuestro trabajo.
El respaldo teórico aportado por los invitados internacionales fue importantísimo por la información que contenía pero sobretodo por el hecho de que existía. Podemos aprender mucho de ellos. La danza tiene un peso teórico mucho más desarrollado fuera de España y se utiliza con habilidad para establecer diálogos entre iguales.

Tareas pendientes

Esta primera experiencia ha querido abordar mucha temática en pocos días. Fue un buen punto de partida para desarrollar futuros encuentros que nos permiten profundizar en temáticas específicas y atender a algunos de nuestros puntos frágiles.

Necesitamos saber expresarnos de forma precisa y coherente, de elaborar y ordenar una sólida base teórica para todo lo que nos mueve de manera tan intuitiva dentro de nuestra labor diaria. Este aspecto es fundamental en todas las etapas de la creación y para la comunicación y promoción eficaz de la programación.

Tenemos que ser capaces de articular nuestros proyectos teniendo en cuenta en cada momento con quiénes estamos hablando. No podemos depender de la complicidad del interlocutor.

Más que nunca está claro que cuánto mejor sabemos explicarnos y defender posturas en todos los terrenos que nos tocan y que nos puedan tocar, mayores posibilidades tengamos de conseguir una escucha entre iguales.

Las condiciones de producción para la mayoría de las compañías españolas no permiten contemplar períodos de investigación adecuados. Esta problemática hace que muchas veces las colaboraciones artísticas no se desarrollen plenamente. Habrá que aprovechar nuevas dinámicas de producción que permiten fortalecer esta etapa fundamental para el proceso y para el resultado final.

La mesa redonda sobre el código de buenas prácticas no se llegó a realizar como tal. Se compartieron experiencias desde la perspectiva de la educación, la programación y la creación. Queda pendiente sin embargo, un verdadero debate para sentar las líneas de un código de buenas prácticas, especialmente útil en un campo dirigido a los más jóvenes. Sería interesante iniciarlo con una propuesta inicial de líneas a desarrollar para centrarnos en lo concreto desde el principio.

Fue significativo el encuentro con educadores que defienden, por experiencia propia en sus centros, el papel de la danza en la educación básica. Parece evidente que hay datos suficientes para elaborar una propuesta específica para avanzar su implantación en España y no hay excusas para demorarlo más.

Empoderamiento:

*”El movimiento constituye el esqueleto mismo de la vida (el cuerpo está hecho para moverse) y, por esta precisa razón el movimiento constituye el esqueleto de la expresión artística en su obstinado deseo de hacer visible algún aspecto de la vida”.

Este Encuentro con la Danza nos ha ofrecido unos buenos ejemplos de empoderamiento. Emma Gladstone habló de la importancia de ser ambicioso para sus artistas y su futuro. Diría también que deberíamos ser ambiciosos para nuestro público y su futuro, y para nosotros y nuestro futuro como profesionales comprometidas con las artes, con la educación, y con las personas. Para ese obstinado deseo de hacer visible algún aspecto de la vida que nos impulsa a bailar.

Laura Kumin

*gracias a Lali Bosch por permitirme citarle en estas conclusiones.

Pin It on Pinterest